

Los historietistas peruanos no solemos comernos ningún gran pleito. Ya bastante tenemos con tratar de publicar nuestra chamba (en 7 u 8 medios a la vez para llegar a fin de mes), como para estar con eso del calentamiento global o el desarrollo de armas atómicas en Irán. Aunque si nos ponemos a hablar de excepciones, lo que hace cada semana Álvaro Portales en El Otorongo es de quitarse el sombrero.
Pues, como decía, a los historietistas nos vacila más la onda del tipo DT frustrado. Es decir, yo sé mucho más que el técnico de la selección cómo deberían jugar los muchachos. Algunos, como el señor de este blog http://www.vltracomics.blogspot.com/ asumen el papel de conciencia nacional de lo que está bien y lo que está mal. Y más allá de haberme dedicado cantidad de caracteres, lo bueno es que al menos da la cara y se faja. Claro, se faja contra los que no son sus patas. Pero se faja y eso se aplaude. Además, es muy buen dibujante (al menos para este medio).
Lamentablemente están los otros. Los más pequeñitos, que ni dibujar saben. Y esos no se fajan nada. Simplemente dejan sus bombitas regadas por doquier con toda la mala leche del mundo y, encima, con unos pseudónimos que pa qué te cuento.
En fin. No quiero aburrir más a aquellos que de estos conatos virtuales entre creadores (?) no saben nada. O simplemente no les interesa saber.
Solo quería dejar claro que somos unos animales.